domingo, 13 de diciembre de 2015

El sueño de la razón produce monstruos








El autor de este cuadro es Goya


Contexto histórico:
El contexto histórico de este cuadro es la Ilustración que fue un movimiento cultural e intelectual europeo que se desarrolló a finales  del siglo XVII hasta el inicio de la Revolución Francesa este movimiento consistía en que la razón humana podía combatir la ignorancia, la superstición y la tiranía para construir un mundo mejor.
 Goya fue  un gran defensor de las ideas de la Ilustración y utilizó en multitud de ocasiones su arte como una forma de denuncia social. Su gran imaginación además de su creatividad,  le llevaron a experimentar  diferentes técnicas como el grabado. Goya es el primer artista que podríamos denominar contemporáneo tanto por el sentido de su obra como por la libertad artística manifestada en ellas.

Tema:

En esta Obra se puede ver a una persona sentada con la cabeza  entre los brazos y que se apoya en una mesa con actitud de estar  dormido  o  de  protegerse de un fondo oscuro lleno de animales nocturnos como lechuzas y murciélagos que parecen amenazar al hombre.

Respecto al significado de la Obra, podemos deducirlo por el título que el propio autor le da a la misma y parece ser que muestra como después del agotamiento mental que supone un trabajo intelectual, la razón acaba durmiendo y le atacan los monstruos del pasado. En la noche, las sombras se vuelven monstruos, pero al acercarse a la luz se ven como animales. Esta confrontación luz-sombra es la que protagoniza el grabado.

Rasgos:

Se trata de un grabado que usa la técnica de aguafuerte





Pequeños detalles:

Algunos autores hablan de que la lechuza que aparece en el cuadro  representa a Minerva, diosa de la sabiduría, que le acompaña al durmiente para ayudarle. El fondo del grabado representa la noche, con su carácter onírico y como buen animal de la noche,un gato parece observar la escena.
Respecto a la intención de Goya es la de  una denuncia de como los poderes de la noche, identificados con la ignorancia y el fanatismo religioso propios del Antiguo Régimen, amenazan al conocimiento y la Razón, valores ilustrados de los que Goya era defensor.